Persistir en la oración

Día 11

'Una vez, Jesús estaba orando en cierto lugar. Cuando terminó, uno de sus discípulos se le acercó y le dijo: —Señor, enséñanos a orar, así como Juan les enseñó a sus discípulos. '  Lucas 11:1(NTV)

'Cierto día, Jesús les contó una historia a sus discípulos para mostrarles que siempre debían orar y nunca darse por vencidos.' -Lucas 18:1(NTV)


En Lucas 11 y Lucas 18, Jesús nos enseña sobre la disciplina de oración y lo esencial de la oración persistente. En Lucas 11, cuando los discípulos le piden a Jesús que les enseñe a orar, Él no solo ofrece una oración modelo, sino que también los alienta a seguir pidiendo, buscando y llamando (Lucas 11:9), enfatizando la importancia de la perseverancia en la oración. El mensaje es claro: la oración no es solo un acto único, sino una conversación continua con nuestro Padre Celestial.

En Lucas 18, Jesús refuerza este mensaje, pero esta vez no hay preguntas de los discípulos. En lugar de eso, es como si Él les recordará, tanto a ellos como a nosotros, que debemos orar siempre y no rendirnos. Existe un énfasis en ambos pasajes en la persistencia, y en este último pasaje, Jesús subraya que a medida que crecemos en nuestra fe, habrá momentos en los que necesitaremos recordarnos de permanecer en la oración—especialmente cuando parece que Dios no responde de inmediato. Debemos seguir pidiendo, seguir buscando y seguir llamando, incluso cuando parece que no está sucediendo nada.

Ambos pasajes destacan que la oración es el medio por el cual nos comunicamos con nuestro Padre Celestial, y es a través de esta relación que construimos fe y perseverancia. Jesús nos enseña a persistir en la oración, no porque Dios esté distante o sea renuente, sino porque a través de la perseverancia, nos acercamos a Él y experimentamos su voluntad de maneras más profundas. Nuestra creencia (fe) de que Dios actuará y proveerá— incluso cuando no vemos inmediatamente los resultados— es el sello distintivo de una relación en crecimiento con Él. Porque es muestra que nuestra dependencia está en El.

Llamado a la Acción:

A medida que navegamos estos 21 días de ayuno, se nos presenta un reto a cada uno de nosotros, de comprometernos a orar; específicamente con el objetivo de construir una comprensión más profunda de la voluntad de Dios para nuestras vidas. Aprovechemos esta oportunidad para buscar su guía, sabiduría y claridad en nuestra jornada personal. Establezcan un tiempo dedicado cada día para orar sobre esta intención y permitan que el Espíritu Santo les revele lo que Dios desea para ustedes en esta temporada. Mantengámonos mutuamente responsables con este compromiso, compartiendo nuestras experiencias e ideas mientras buscamos acercarnos más a Dios juntos. Que esta oración nos lleve a una relación profunda con nuestro Padre Celestial y despierte nuestro propósito espiritual.

Oración:

Padre Celestial, gracias por el regalo de Tu Santo Espíritu. Gracias por ser un Padre, que en Tu tiempo, responde cuando pedimos, nos encuentra cuando buscamos y abres las puertas cuando llamamos. Al entrar en estos 21 días de ayuno, oro para que nuestros corazones y mentes sean estimulados a pedir, buscar y llamar con mayor persistencia. Que nuestro deseo de experimentar Tu presencia crezca. Ayúdanos a recordar que Tú satisfarás nuestras necesidades, y que a través de este ayuno, nuestros apetitos espirituales serán despertados. Permite que este tiempo nos acerque más a Ti a través de la oración, mientras confiamos en que nos guiarás y nos fortalecerás. En el nombre de Jesús, Amén.

Contigo,

Josue

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